Los millennials están cambiando el mundo empresarial
Unos de los conceptos son las flexibilidades, lo cual implica mayor autonomía, con el fin de fomentar la motivación y creatividad, pero acaso todo esto ¿Tiene que ver con un cambio generacional?
Los millenials están cambiando el mundo empresarial. We know it, Einstein!! Me podrían decir.
Es cierto que los tiempos han cambiado y ya no podemos entender el “lugar de trabajo” únicamente como las oficinas o locales físicos, sino que hoy comprendemos como los sitios donde el trabajador puede ejercer sus funciones, y un sin fin de nuevos conceptos que abarcan la idea de “trabajo”. Unos de los conceptos son las flexibilidades, lo cual implica mayor autonomía, con el fin de fomentar la motivación y creatividad, pero acaso todo esto ¿Tiene que ver con un cambio generacional?
En un informe de la Universidad de Harvard explica cómo los millennials han convertido las prioridades de una empresa y la idea del trabajo. Es una generación que necesita estar motivada, desafiada de forma constante, ya que los estándares de estabilidad o dinero, no son factores decisivos a la hora de mantenerse en su puesto laboral.
Así mismo, los millennials prefieren la transparencia y el compromiso social que puede tener una empresa, comprendiendo esto como valores integrales que aportan a su profesionalismo, pero también a la constante construcción de una sociedad equitativa y diversa, cambiando el paradigma del mundo organizacional.
Ante todo este escenario, me pregunté ¿Qué es lo que necesitamos?, tome algunos apuntes del artículo:
Autonomía: otorga libertad de espacios físicos, pero al mismo tiempo construcción de cohesión entre trabajadores en el ámbito social.
Incorporar la flexibilidad y la adaptabilidad como valores para potenciar al máximo el desarrollo de cualquier proyecto.
Formar equipos de máxima libertad para que alcancen sus objetivos. La autonomía es sinónimo de confianza y desarrolla competencia de responsabilidad para actuar por iniciativa propia.
Un liderazgo democrático y participativo, que aporte valores a la empresa y permita una toma de decisiones compartida al máximo por todas las personas de la organización.
Dar oportunidades a todas las personas y potenciar la creatividad y diversidad. Ser capaces de motivar más allá de una prestación económica y con claros y tentadores desafíos.
Ante estas especificaciones, la investigación cita el libro de Koldo Saratxaga “Un nuevo estilo de relaciones. Para el cambio organizacional pendiente”, de un modo muy acertado:
“Ahora nos vemos en la necesidad de contar con organizaciones basadas en el conocimiento, con capacidad de considerar la innovación y el saber hacer de sus personas como su valor principal. La innovación, no limitada al producto, sino en su sentido más amplio, es decir, la que abarca toda la organización, no se define ni se cuantifica: debe constituir la naturaleza, el ser de la organización, y se logra cuando las personas toman el protagonismo”.
Ideas claves para crecer como empresa
1. Reconocimiento al trabajo y a la persona: Un regulador fundamental en las relaciones entre las personas, porque refuerza el vínculo y en el mundo organizacional, pasa por escuchar, premiar y ofrecer alternativas, mucho más allá de lo retributivo económicamente.
2. Crear objetivos en común: Cuando las competencias que los trabajadores desarrollan dentro de la organización forman parte de su plan de mejora competencial para alcanzar sus objetivos profesionales a largo plazo, están mucho más motivados para adquirir y mejorar aquellas competencias necesarias para la organización.
3. Confianza: La confianza es un valor que implica oportunidad, es una guía que nos lleva a un amplio abanico de posibilidades para llegar a la cohesión interna de los equipos. Una inmensa mayoría de personas, si se les da la oportunidad, son responsables, creativas y tienen capacidad para autoorganizarse.
Uno de los puntos que me llamó la atención es el bienestar en igualdad de oportunidades, un concepto que aún debemos desarrollar, y que según la investigación, una empresa que se sustente sobre los criterios de igualdad entre trabajadores, considerando la integración y sensibilización de su género, consigue la base de su sostén: la mejora del clima laboral para un mayor crecimiento y productividad.
En conclusión, los millennials cambiaron completamente el paradigma del trabajo enfocado en el factor humano, las personas como eje vertebrador. Las empresas necesitan dirigir sus fuerzas en equipos de bienestar y producir oportunidades personales y profesionales, como una responsabilidad colectiva de modelo laboral.
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